Los Ciclos Naturales y Vitales - Vida y Muerte
Una breve mirada a los ciclos vitales anuales y diarios muestra energías parecidas, naturales, de las cuales sacamos provecho en los procesos terapéuticos. La fase de Invierno/Noche es un estado de descanso, sin actividad, digestión, oscuridad, lo invisible e inconsciente dentro del cuerpo. En la Primavera/Mañana brota la individualidad, propósitos, decisión y dirección, movimiento potente, violento y dirigido. En el Verano/Día hay un pleno encuentro con el resto del mundo, conflictos, sexo, cada animal come y se aprovecha de los otros (animales y plantas). En el Otoño/Tarde se nota si se han satisfecho los propósitos, puede haber alegría o tristeza. La vuelta al Invierno/Noche está marcada por la paz con lo sucedido, aprendizaje y digestión. No hay una fase más importante que las demás. Es el ciclo entero lo que es la vida sana.
Los ciclos de la vida, del Universo, tienen un comportamiento como de pulsación: expansión y contracción, pleno verano o pleno invierno. Una parte de nuestros miedos o bloqueos a entregarnos a los ciclos naturales radica en la fantasía de que vamos a morir en estas fases. Es decir, que llegando al verano o pleno contacto con el resto del mundo haya la posibilidad de que (nosotros o los demás) explotemos totalmente, destrozándolo todo. “Tengo la sensación de que me voy a comer a todo el mundo o que me van a comer a mí”. Y lo mismo ocurre llegando a la oscuridad de la noche, invierno y retirada, pues el miedo es a congelarnos, cayendo en una oscuridad permanente y desapareciendo en la Nada. Estos terrores inconscientes inhiben el avance. Cuando nos permitimos entrar plenamente en estas fases son momentos claves en la transformación.
Este ciclo se repite a todos los niveles de la vida humana: niño, adolescente, adulto y anciano. Como adultos todos tenemos algo de cada una de estas fases. Para tener una experiencia completa y una vida sana debemos reconocer, amar y pasar por todas estas fases. La estructura de la formación consiste en reconocer, definir, abrazar y cuidar cada una de tus partes en estas fases.
Movimientos Cíclicos de Liberación y Gestalt
Gestalt significa cumplir sanamente un ciclo de satisfacción de necesidades. Para satisfacer de forma saludable las necesidades personales, tenemos que atravesar un ciclo: desde una sensación inconsciente de necesidad, pasando por una toma de conciencia que conduce a la movilización del yo (del ego, de todas las fuerzas vitales) hasta llegar a la acción (compromiso) que permitirá satisfacer la necesidad. Un contacto pleno en la acción permite que se experimente satisfacción y una retirada a un estado de reposo. La conclusión de un ciclo entero es necesaria para la satisfacción de las necesidades, el aprendizaje y el desarrollo saludable.
Todas las personas nos quedamos estancadas a veces en alguna de estas fases, experimentando bloqueo en la realización de un ciclo de satisfacción. Darnos cuenta y seguir los ciclos de satisfacción de las necesidades es una herramienta principal en la formación de Agentes de Transformación. A la vez que reconocemos como funcionan los propios bloqueos podemos apoyar a otras personas en su liberación y satisfacción en la vida.
Los ciclos de la vida, del Universo, tienen un comportamiento como de pulsación: expansión y contracción, pleno verano o pleno invierno. Una parte de nuestros miedos o bloqueos a entregarnos a los ciclos naturales radica en la fantasía de que vamos a morir en estas fases. Es decir, que llegando al verano o pleno contacto con el resto del mundo haya la posibilidad de que (nosotros o los demás) explotemos totalmente, destrozándolo todo. “Tengo la sensación de que me voy a comer a todo el mundo o que me van a comer a mí”. Y lo mismo ocurre llegando a la oscuridad de la noche, invierno y retirada, pues el miedo es a congelarnos, cayendo en una oscuridad permanente y desapareciendo en la Nada. Estos terrores inconscientes inhiben el avance. Cuando nos permitimos entrar plenamente en estas fases son momentos claves en la transformación.
Este ciclo se repite a todos los niveles de la vida humana: niño, adolescente, adulto y anciano. Como adultos todos tenemos algo de cada una de estas fases. Para tener una experiencia completa y una vida sana debemos reconocer, amar y pasar por todas estas fases. La estructura de la formación consiste en reconocer, definir, abrazar y cuidar cada una de tus partes en estas fases.
Movimientos Cíclicos de Liberación y Gestalt
Gestalt significa cumplir sanamente un ciclo de satisfacción de necesidades. Para satisfacer de forma saludable las necesidades personales, tenemos que atravesar un ciclo: desde una sensación inconsciente de necesidad, pasando por una toma de conciencia que conduce a la movilización del yo (del ego, de todas las fuerzas vitales) hasta llegar a la acción (compromiso) que permitirá satisfacer la necesidad. Un contacto pleno en la acción permite que se experimente satisfacción y una retirada a un estado de reposo. La conclusión de un ciclo entero es necesaria para la satisfacción de las necesidades, el aprendizaje y el desarrollo saludable.
Todas las personas nos quedamos estancadas a veces en alguna de estas fases, experimentando bloqueo en la realización de un ciclo de satisfacción. Darnos cuenta y seguir los ciclos de satisfacción de las necesidades es una herramienta principal en la formación de Agentes de Transformación. A la vez que reconocemos como funcionan los propios bloqueos podemos apoyar a otras personas en su liberación y satisfacción en la vida.